Francisco Machalskys- Tal como lo hiciera público el pasado mes de junio, la Universidad de Elon dio a conocer su disposición a expandir su programa de incentivo escolar It Takes a Village, que durante este otoño brindará atención a unos mil 200 escolares de 11 escuelas primarias pertenecientes al sistema escolar de Alamance-Burlington.
El programa, que desde 2008 ofrece apoyo a niñas y niños de hogares clasificados como de bajos recursos económicos, logró este importante paso gracias al aporte de mil 250 millones otorgados por la Fundación Oak, organización de ayuda social con base en Suiza que desde 1983 auspicia un amplio rango de iniciativas de Derechos Humanos, que van desde la protección del ambiente hasta el amparo a la mujer.
En tal sentido, cabe destacar que es esta la cuarta vez que la Fundación Oak brinda apoyo a este programa que inició como una extensión de la cátedra de Educación dirigido inicialmente a apoyar a niños del condado de Alamance con problemas de lectura.
Lo interesante de este proyecto, hoy con miras a ser masivo, es que arrancó prestando apoyo a unos 40 niños captados en una biblioteca pública de Alamance. En la actualidad, con el apoyo de la Fundación Oak, se suman a su expansión 300 personas de la Universidad Elon, entre voluntarios y personal adscrito.
Sobre la expansión de su cobertura opina José Alex Reyes, beneficiario de este programa y que hoy recibe su título de bachiller tras culminar sus estudios de educación media del plantel Cummings High School. “Me uní a este proyecto estando en primer grado, y jamás imaginé el impacto que tendría en mi vida, y en la de tantos otros”, comentó en un acto posterior a su graduación.
Tal como comenta Dan Habla, director de la Universidad Elon, unos 300 voluntarios se han adherido a esta nueva fase del programa para garantizar su continuidad. “Veo caras de satisfacción en cada rostro. Académicamente los beneficiarios están avanzando, pero lo importante es ver caras de satisfacción a medida que avanza esta iniciativa”, agregó.
Como parte del programa, las escuelas participantes indican cuáles son sus necesidades a reforzar en cada materia en específico. “Por supuesto, tenemos la responsabilidad de aminorar las barreras en temas como racismo, clasismo, e inclusión”, agregó Habla.
En apoyo a los 300 voluntarios empeñados en hacer efectivo este programa se suman 60 maestros, consejeros y directores de unas 12 escuelas adscritas al circuito educativo de Alamance-Burlington. Jean Rattigan-Rohr, vicepresidente de It Takes a Village, destacó el notable alcance del mismo, pasando de atender a los niños involucrados en el Campus de la Universidad de Elon, a desarrollarlo in situ para comodidad de los pequeños beneficiarios.
Y como proyección a futuro, aprovechando el espaldarazo económico brindado por la Fundación Oak, se anunció el lanzamiento de Start Early in Medicine, que auspiciará a 100 bachilleres pertenecientes a distintas minorías sociales que desean contribuir con su comunidad a través de las ciencias médicas.