Alexis Quintar- El pasado 7 de octubre, Vladímir Putin cumplió 70 años, pero seguramente no tuvo nada por lo que festejar, ya que el aluvión de críticas que recibió el ejército ruso que invadió Ucrania fueron impactantes. No obstante, varios mandatarios saludaron al presidente ruso, entre ellos el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, un aliado tradicional de Rusia, quien le envió una carta a su homólogo. “Hoy, Rusia defiende de manera confiable la dignidad del estado y sus intereses fundamentales de los desafíos y amenazas de Estados Unidos y sus fuerzas vasallas. Tal realidad es impensable sin su distinguido liderazgo y fuerte voluntad”, expresó Kim.
Sin embargo, en medio de toda esta “celebración”, Putin sufre un motín a bordo y eso quedó evidenciado el pasado jueves 6 de octubre cuando Kirill Stremousov, un funcionario puesto a dedo por Rusia en Kherson, una región ocupada al sur de Ucrania, tuvo fuertes declaraciones en contra del ministro de defensa del Kremlin, Sergei Shoigu, una persona muy cercana al presidente ruso. “Muchas personas dicen que, como oficial, el ministro de Defensa podría simplemente pegarse un tiro por ser el que permitió que las cosas llegaran a este estado”, expresó el “vicegobernador” Stremousov en un video que se viralizó en la red de mensajería Telegram.
Lo que ocurre es que las desinteligencias que tuvo el ejército ruso en los últimos días generaron una dura derrota en un enfrentamiento en el noreste ucraniano contra las fuerzas lideradas por el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. Esta caída hizo que la semana pasada las tropas rusas retiraran dos unidades del frente de batalla, un hecho que llamó mucho la atención.
En este sentido, el jefe del comité de defensa de la cámara baja del Parlamento de Rusia, Andrei Kartapolov, fue contundente con el Ministerio de Defensa, ya que la noticias que salen a la luz por parte del gobierno ruso, no serían verdaderas y encubrirían el mal momento que atraviesa el ejército de Putin. “Tienen que dejar de mentir. Nuestra gente no es tonta, ni mucho menos, y ven que no se les toma en serio. No se considera necesario decirles ni siquiera una parte de la verdad, y mucho menos toda”, manifestó el pasado miércoles Kartapolov mediante un comunicado.
Hasta el momento, Shoigu no ha respondido a las críticas que hizo Kartapolov sobre los métodos que utiliza para informarle al pueblo ruso sobre el desempeño que tienen sus tropas en el noreste de Ucrania, las cuales estarían perdiendo terreno de manera considerable. Cabe mencionar que toda esta polémica surgió mientras Putin y gran parte de su comitiva, entre ellos el Ministro de Defensa, estuvieron de vacaciones en Siberia, en donde acamparon en la reserva natural de las montañas de Tuvá. Aunque ninguna de las críticas que se hicieron cayeron directamente sobre Putin, pero sin duda, toda esta polémica tomará mucha más repercusión si las bajas rusas continúan en el campo de batalla.
Una de las personas que hizo hincapié en este tema fue Tatiana Stanovaya, analista política rusa y fundadora del portal web, R.Politik, la cual aseguró: “Estamos viendo por primera vez un ataque personificado de uno contra el otro dentro del régimen. Esta es una situación bastante peligrosa para Putin porque nadie la controla”. Si bien Putin durante los más de 22 años de gobierno nunca había tenido conflictos con las críticas generadas en torno a su mandato desde que invadió Ucrania el 24 de febrero, el presidente decidió acallar las voces discrepantes y obligó a periodistas y activistas a irse del país y también cerró varios medios de comunicación independientes.
Lo que nunca imaginó el mandatario ruso es que entre sus partidarios se generarían críticas furiosas contra su gobierno. Muchos blogueros de guerra y funcionarios públicos mediante Telegram, la red social de mensajería, remarcaron y se quejaron de las fallas que tuvieron las Fuerzas Armadas en la guerra contra Ucrania. Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dejó entrever que hay cierto descontento con las disposiciones que toman algunos dirigentes rusos por estos días. “Hay desacuerdos sobre esas decisiones. Algunos piensan que deberíamos actuar de forma diferente. Pero todo esto forma parte del proceso de trabajo habitual”, reveló Peskov en una entrevista que le concedió a The Washington Post.
Al referirse a los intercambios de opiniones que habría entre varios integrantes del círculo más íntimo de Putin, Peskov señaló: “Hay discusiones de trabajo: sobre la economía, sobre la conducción de la operación militar. Hay discusiones sobre el sistema educativo. Esto forma parte del proceso normal de trabajo y no es señal de ninguna división”. Evidentemente, las recientes noticias que llegan desde Rusia no son favorables para Putin y las decisiones que está tomando parecieran ser medidas desesperadas y pudieran considerarse las medidas más arriesgadas de su carrera política.