Leah Carlson- En el este de Burlington, en la esquina de North Church Street y Graham-Hopedale Road, se alzan amenazantes las instalaciones abandonadas y contaminadas de la propiedad Western Electric. Sin embargo, esta edificación que hoy arruina un importante vecindario comercial y residencial de la ciudad, no siempre constituyó una amenaza, pues fue en su momento el bullicioso epicentro de desarrollo de la zona.
Cuando era propiedad del Departamento de Defensa de los Estados Unidos (DoD, por sus siglas en inglés), entre los años 1942-2004, era conocida como la antigua Planta de Misiles del Ejército Tarheel (TAMP, por sus siglas en inglés). Durante las décadas de 1950 y 1960 en sus instalaciones trabajaron unas 4.000 personas desarrollando tecnología de misiles tierra-aire, crucial durante la Guerra Fría. Luego, sus más de 20 edificios y 22 acres de terreno, han pertenecido a cuatro diferentes propietarios privados.
En un reciente informe, elaborado a instancias del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos, que actualmente supervisa la descontaminación del lugar, se destacan no sólo el hallazgo de “edificios en ruinas” y “techos con goteras parcialmente derrumbados”, sino, más grave aún, altos niveles de sustancias químicas asociadas a disolventes clorados en el agua de un túnel en las instalaciones así como en el suelo y las aguas subterráneas.
Entre ellos, el Tricloroetileno, el Tetracloroetileno, el benceno y el cloruro de vinilo, todos relacionados con el cáncer. También, según el documento, es probable que muchos de los edificios contengan vapores peligrosos procedentes de las aguas subterráneas contaminadas.
Las responsabilidades
Aunque el actual propietario privado es responsable de descontaminar todo lo que está sobre el suelo, como las edificaciones, y el Departamento de Defensa (DoD) de todo lo que está por debajo del suelo como, por ejemplo, las aguas, según un folleto sobre el tema de la ciudad de Burlington, la limpieza de este sitio es “particularmente complicada” pues la venta a propietarios privados creó una “enmarañada red de responsabilidades” en lo que respecta al saneamiento ambiental.
“El sitio de Western Electric es único debido a las múltiples partes responsables del saneamiento y a que el actual propietario no tiene planes inmediatos de desarrollar el lugar. Los planes de desarrollo son importantes para establecer los objetivos de descontaminación del DoD”, sostiene el documento.
La ciudad asegura que otro aspecto que hace aún más compleja la situación de la propiedad es que cuando el actual dueño, Central Park Burlington, LLC, solicitó ante el Departamento de Calidad Ambiental de Carolina del Norte (NC DEQ, por sus siglas en inglés) un acuerdo sobre terrenos abandonados contaminados, se determinó que el propietario no cumplía con los requisitos.
“Central Park Burlington, LLC adquirió la propiedad de TAMP en junio de 2018. Desde ese momento, ha sido responsable de controlar el acceso para evitar una mayor contaminación durante su propiedad. La documentación (…) indica que ha habido incidentes de vandalismo en la propiedad y que al menos un contratista que trabajaba en el sitio tenía preocupaciones por la seguridad de su personal”, se puede leer en el documento del NC DEQ que niega la posibilidad de acogerse a este acuerdo.
Además, según registros estatales citados en medios locales, en repetidas ocasiones el propietario no ha mantenido la seguridad del lugar y en el interior de los edificios, cuyos techos se están derrumbando, viven personas sin hogar.
La participación en el Programa de Terrenos Contaminados habría protegido al propietario contra responsabilidades previas por contaminación ambiental y también podría haberle ofrecido asistencia financiera para la rehabilitación.
La limpieza
Según la publicación de la ciudad de Burlington, la descontaminación del terreno se rige por la Ley de Respuesta Ambiental Exhaustiva, Compensación y Responsabilidad Pública (CERCLA, por sus siglas en inglés), una normativa federal aplicada por la Agencia de Protección Ambiental que establece un proceso muy específico para la investigación y saneamiento de los sitios incluidos en la Lista de Prioridades Nacionales (conocidos comúnmente como “Superfondos”).
De acuerdo al cronograma provisional de descontaminación del sitio, en el marco de esta normativa, el DoD está en la Fase 2 del proceso (Investigación para la Rehabilitación y el Estudio de Viabilidad) y también acordó remover la fuente de los contaminantes y agregar una barrera para aguas subterráneas antes de que el plan global esté listo.
“Este trabajo provisional comenzó en febrero. A la fecha el DoD ha invertido alrededor de 3 millones de dólares en el proceso CERCLA. Paralelamente, el DoD está completando la Investigación para la Rehabilitación y el Estudio de Viabilidad”, informa la publicación.
Posteriormente, el proyecto avanzará a la Fase 3 (Completar el Plan Propuesto). Durante esta etapa el público aportará al DoD sus ideas para el uso final que se le dará a la propiedad. También, se creará una Junta Asesora de Recuperación, conformada por miembros de la comunidad y funcionarios del gobierno local. En el futuro, la Ciudad y el DoD enviarán a la comunidad información sobre está iniciativa.
La ciudad
La Ciudad de Burlington ha emprendido varias iniciativas para lograr que la recuperación del sitio avance. Además de crear un equipo de trabajo interno sobre Western Electric, que incluye representantes de los departamentos de Planificación, Ingeniería, Policía, Bomberos, Aplicación de la Norma y Desarrollo Económico, proporcionó actualizaciones periódicas sobre el estado del sitio en las reuniones y sesiones de trabajo del Ayuntamiento y asistió como panelista y participante al foro sobre Justicia Medioambiental 2023, organizado por grupos comunitarios y los Institutos Nacionales de Ciencias de la Salud Medioambiental.
Otra iniciativa fue la inscripción de la propiedad Western Electric en el Registro Nacional de Lugares Históricos con la idea de obtener créditos fiscales para ayudar a sufragar los costos de reurbanización. Asimismo, trabajó por la inclusión de la propiedad en las Zonas de Oportunidad Federales (OZ, por sus siglas en inglés) de Burlington, que otorga más herramientas fiscales y de inversión para ayudar a la reurbanización.
También ha trabajado con funcionarios federales electos de Burlington para convencer al Secretario del Ejército de que eleve la propiedad de Western Electric a la categoría de crítica y designe al máximo responsable de proyectos del Comando Ambiental del Ejército para supervisar el proceso de limpieza CERCLA.
En el 2018 se asoció con el American Institute of Architects para lograr una Subvención para Equipos de Evaluación de Diseño Sostenible. El objetivo fue desarrollar una visión de la propiedad basada en la comunidad a través de un proceso que incluía visitas in situ, aportaciones de las partes interesadas, presentaciones sobre el proceso de saneamiento y análisis del potencial de desarrollo del sitio.
Asimismo, los miembros de la comunidad también pueden apoyar a los funcionarios electos de la ciudad, sumando su voz al proceso para defender y argumentar a favor de una limpieza completa y exhaustiva del lugar.
Por ejemplo, pueden compartir las razones por las que la limpieza y revitalización de Western Electric es importante para ellos y su comunidad con testimonios personales y específicos como, por ejemplo, sus recuerdos de lo que el sitio significaba para Burlington y lo que esperan para su futuro y enviarlos a las oficinas del Gobernador Roy Cooper, los senadores Thom Tillis y Ted Budd y las congresistas Valerie Foushee y Kathy Manning.
“La ciudad está trabajando con todas las partes involucradas con el objetivo de descontaminar el lugar y eventualmente volverlo a urbanizar”, afirman.